El origen del fútbol en España fue lento y disgregado a lo largo de todo el país. Exportado desde Gran Bretaña, como a varias partes del mundo, llegó para último cuarto del siglo XIX ayudado claramente por el fenómeno desatado llamado la revolución industrial.
Por ese entonces la situación económica española era deficiente, por lo que vio llegar además de financiamientos extranjeros, maquinaria y personal calificado.
Los británicos llegaron para instalarse en España a principios de 1870 a través de empresas que exportarían yacimientos mineros, desarrollo de ferrocarriles, construcción de centros siderúrgicos, montar cable submarino o dedicarse a la importación o exportación a través de las rutas marítimas, trajeron con ellos además de sus costumbres un deporte totalmente desconocido al que denominaban «football”.
Este deporte en sus comienzos, por lo general era practicado comúnmente por empleados de empresas en los horarios de descanso. Eran juegos pocos concurridos donde pocas veces se lograban juntar 22 jugadores. En esa época, otros deportes eran más populares como el cricket y el remo, o el lawn-tennis.
El football llevaba varias décadas de práctica en el Reino Unido, aunque todavía seguía sufriendo modificaciones en sus reglas. Se podría decir que era más parecido a lo que conocemos como rugby. Es decir que cada lugar de origen tenía reglas para el football diferentes a otro lugar. Es decir que si se enfrentaban equipos provenientes de un mismo lugar, no había problemas en cuanto a la reglamentación, en casos contrarios, siempre terminaban en discusiones.
Puedes leer aquí: 1879, El Cricket y Foot-ball Club de Madrid, el primer Club Español de fútbol.
Para 1890, hasta los propios británicos instalados en España, no pudieron aplicar las reglas universales que había consensuado la I.F.A.B.