Del año 1913, el archivo nos detiene ante la primera tarde de noviembre. Se Jugaba un match por la semifinal de la Copa de Honor. contra Estudiantes. Quienes lo presenciaron nunca olvidaron su trámite intenso y apasionado que se grabó en el tiempo como un partido arquetípico.
En el primer periodo, Boca se puso en ventaja con goles de Calomino y Romano Dos goles de Max Susan, el crack imolvidable de nuestros primeros tiempos de fútbol, igualaron las cosas en el periodo siguiente. Pero Boca Juniors contraatacó vigorosamente y logró por medio de Romano otros dos goles.
El esfuerzo xeneise fué alcanzado nuevamente por el rival, ya que dos goles de Ochandio empataron nuevamente el partido. Iban 4 a 4 ya convencidos de que estos goles de a dos juntos habian dado un final armonioso a la lucha cuando el habilisimo Max Susan, en tiempo suplementario, logró un gol y dió a Estudiantes ventaja hasta que finalizó el cotejo.
5 a 4 había ganado Estudiantes, en un match que integra los buenos recuerdos del historial futbolístico criollo, allá cuando el siglo recién superaba su primera década y el fútbol comenzaba a abrirse paso con fuerza en los terrenos y el corazón de América.