Los Primeros Jugadores de Ferro en su Historia

Leer las páginas del viejo “Ferrocarril Oeste” es acercarse a vivos arquetipos del fútbol argentino, a figuras representativas no sólo del fútbol, a hechos que hacen a la anécdota toda de nuestro popular deporte…

Veamos nombres en la primera década del siglo, por el año 1906 y algunos siguientes: los hermanos Ceferino y Aniceto Camacho, Zibecchi, Mañana, Martín, John Harley. Este último era un inglesito delgado y sin aspecto de atropellador precisamente, pero que constituyó una revelación en nuestras canchas por su personal estilo, depurado y pensado, que se impuso entre los muchachos criollos con méritos que trascendieron a la vecina orilla. Y Harley fué conquistado años después por el “Peñarol”, donde su prestancia y calidad lo convirtieron en maestro del fútbol en esa tierra de grandes artífices.

Otra figura consular del fútbol que pasara por “Ferro” fué Atilio Badaracco, que vive en Buenos Aires con sus 70 años de recuerdos emotivos. Badaracco fué el primer “descubridor” de Pedro Calomino, allá por el 1907, cuando el más tarde idolo internacional aspiraba a llenar algún vacio como suplente quinceañero en alguna división inferior…

En 1910, cuando el equipo asciende a la categoría superior, jugaban en sus filas hombres que ya lucian auténtico prestigio deportivo: Uslenghi, Rotondo, Gutiérrez, Posse, Pini, Elordi, Roldán y otros.

Muchos otros valiosos cracks integraron sus equipos en esos años y en los posteriores: Haaslan, J. C. Frutos, De Andreis, Llevalois, Wickers, Pigo, Corfield y otros más,

Años más tarde, la lista de valores destacadísimos del fútbol acrece para gloria de “Ferro”. Citamos a Garasini, Arico Suárez, Cesarini, Cherro, Gainzarain, Chalú, Della Torre, Polimeni, Recanattini, todos estos celebrados jugadores que pasaron por “Ferro” y luego campearon sus valores con otras divisas —o con la misma del viejo cluba través de los años. Y más adelante en el tiempo, mencionaremos a Corvetto, Marante, Grecco, Leguizamón, Benítez Cáceres, Patrigniani, Garavano, Gualco, Maril, Borgnia, Sarlanga, Gandulla, Emeal, estos últimos cinco delanteros enumerados como en ese ataque modelo de nuestros valores futbolísticos.

El Primer Estadio de Ferro

PRIMER ESTADIO JUNTO CON “ALUMNI”

El primer estadio del popular “Ferro”, fué cedido por el Ferrocarril Oeste al club en oportunidad de su fundación y es el Martín de Gainza 250, con capacidad para más de 50.000 personas.

Allí, en el viejo estadio, jugaba también el equipo de “Alumni”, que nunca tuvo propio campo. Allí comenzaron los viejos prestigios del equipo ferrocarrilero que lucía en sus primeras horas una casaca blanca con bolsillos y franja roja, en señal de peligro… Estos colores fueron más tarde cambiados por los del equipo inglés “Aston Ville”, que eran borravino con mangas celestes, y finalmente el proceso de cambios cromáticos culminó en el esperanzado verde que sigue siendo, y ya para siempre, el “vía libre” del código ferrocarrilero y la definitiva divisa popularizada durante largos años…

Como se Fundó Ferrocarril Oeste

En 1904, un 28 de julio, casi cien empleados del Ferrocarril Oeste concretan orgánicamente la aspiración de hacer fútbol en un acta que ha cumplido un siglo y dice:

ACTA PRECURSORA

“En Buenos Aires, a veintiocho de julio de mil novecientos cuatro, congregados en asamblea, en la oficina de cargas, un núcleo de 96 empleados pertenecientes a las diversas reparticiones del Ferrocarril Oeste, con el objeto de fundar y establecer un club, cuyo fin será el de fomen. tar los ejercicios físicos entre sus asociados, procedieron al nombramienty ad-hoc de presidente y secretario, para actuar en la misma, el que recayó por mayoria de votos en los señores E. Bouchez y F. Goñi, respectiva. mente. Una vez que tomaron posesión de sus cargos, el señor Bouchez presentó y se aprobó en general y en particular, después de algunas modificaciones, las disposiciones y reglamentos que regirán los actos del club establecido, y cuya copia fiel se transcribe a continuación de la presente acta; pasando luego a la elección de las personas que for. marán la comisión directiva, la que quedó constituida por unanimidad de votos en la forma siguiente: presidente, VW. B. Beeston; vicepresi. dente, E. Bouchez; tesorero, J. J. Talmadge; vocales: A. J. Avery, E. S, Languasco, A. F. Rey y F. Goñi.”

A continuación, también por unanimidad de votos, se resolvió conferir el título de presidente honorario al señor representante legal, don Santiago Brian y al señor gerente, don David Simson; y el de socio honorario a todos los jefes de departamento de este ferrocarril, después de lo cual se dió por terminada la asamblea, dando un voto de gracias al señor J. C. Hardy en mérito de haber sido el iniciador de la idea, para la fundación de este club.

Y en los artículos 1, 2 y 3 del capítulo 1 de su Estatuto se establece:

Artículo 1- La Asociación Civil se denominará “Club Ferrocarril Oeste”, constituye su domicilio legal en la ciudad de Buenos Aires y su duración es indefinida.

Art. 2 — Constituyen con carácter fundamental el club: los empleados del Ferrocarril Oeste y sus familias, asociados a la institución, admitiéndose adhesiones ajenas al personal de aquél, pero tanto en cuanto satisfaga las necesidades de sus asociados, sus fines sociales serán los siguientes:

a) Fomentar el desarrollo físico e intelectual.

b) Promover la creación y mantenimiento de relaciones sociales entre los asociados y sus familias, ofreciéndoles todas las distracciones de un centro de cultura.

Art. 3 — Para llenar los fines enunciados en los incisos a) y b) del artículo 2*, la Asociación Civil mantendrá: un local social, canchas y campos de “deportes apropiados, en la medida que los recursos lo permitan y para uso exclusivo de sus asociados e instituciones vincula- das al club, podrá: adquirir y vender muebles e inmuebles y realizar todas las operaciones civiles o comerciales que las leyes del país autorizan a instituciones de la naturaleza del club.