Europa fue visionaria del éxito de un campeonato de clubes campeones. Y la UEFA llevó a cabo esa idea organizando la Copa de Campeones de Europa que tuvo notable repercusión y que motivó gran atracción en la afición.
Los dirigentes de la Confederación Sudamericana: se decidieron entonces a crear un torneo con iguales características al de la UEFA y en el Con. greso Sudamericano que se llevó a cabo en Brasil, en 1958, se sentaron las bases para su organización. Allí, estuvieron por Argentina, Raúl H. Colombo; por Paraguay, Lydio Quevedo y Mendoza Sánchez; por Bolivia, el doctor Quiroga; por Uruguay, Luis Tróccoli, Washington Cataldi, Fermín Sorhueta y Julio Bracco; por Perú, Teófilo Salinas Fuller; por Chile Juan Goñi y por Brasil, Abilio da Almeida y Joao Havelange.
El entonces presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol, profesor José Ramos Fleites, mientras se desarrolla. ba la sesión del Congreso, recibió una propuesta de Henry Delaunay, secretario de la UEFA, sobre la posibilidad de crganizar anualmente una doble confrontación entre los clubes ganadores de Copa de Europa y otra de los de América del Sur. Ello aceleró la necesidad de instrumentar el torneo.
Todo cristalizó en 1959, Fue durante la realización del XXIV Congreso ordinario de la Confederación Sudamericana de Fútbol, que tuvo lugar en Buencs Aires el 5 de marzo de aquel año. Y el 18 de febrero de 1960 se votó la aprobación definitiva, en la Asociación Uruguaya de Fútbol y con la presencia de los representantes de los 10 países afiliados a la CSF, bajo la presidencia de Fermín Sorhueta, de Uru. guay, se le dio forma y dos me. ses después se puso en mar
cha la entonces llamada Copa de Campeones, en la que participaron San Lorenzo de Almagro (campeón argentino); Bahía (de Brasil); Jorge Wilsterman de Cochabamba (Bolivia); Universidad de Chile (Chile); Millonarios (Colombia) y Olimpia (Paraguay).
Relativa importancia le adjudicaron los argentinos a esa competición en sus comienzos, al punto que San Lorenzo resignó la cendición de local para jugar el tercer partido ante Peñarol (por razones económicas) en 1960. Y Peñarol fue el primer campeón.
Tampoco Independiente y Racing, en el ’61 y ’62, respectivamente, lo tuvieron muy en cuenta y como el torneo fue creciendo en atracción general e interés, ya en 1963 los argentinos, representados por Boca Juniors, se prepararon con todo para lograr el titulo.
