El fútbol entra por primera vez en Asia
El proceso expansivo del fútbol moderno fue tan con tanta fuerza, que incluso desembarco en el continente asiático. Un continente impermeable a cualquier innovación extrangera debido al arraigo de sus tradiciones culturales, y aunque no fue con la espectacularidad con que lo hizo en otras partes del mundo, lo cierto es que 1913 se celebró, en Manıla, y ante unos cientos de espectadores con sombrillas para protegerse del sol, el primer encuentro entre selecciones representativas de naciones asiáticas, en el que los locales filipinos derrotaron a un conjunto de China por 2 a 1.
En este juego, se respetaron en gran parte las normativas imperantes en las competiciones europeo-americanas, a excepción de las dimensiones del terreno de juego, que rebasaban las reglamentarias, y de que todavía no se usó allí el poste transversal que acotaba las nuevas porterías.
De un modo u otro, pues, la expansión siguió su trayectoria hasta que fue cortada en seco por el tronar de los cañones: en 1914 estallaba la Primera Guerra Mundial.
La guerra de 1914 provocó un importante freno a la evolución del fútbol de esa época, ya que las personas tenian mayores preocupaciones que las originadas en el deporte.