Primeras Leyendas Argentinas. Ludovico Bidoglio

Jamás dejó de afirmar que su llegada a la selección nacional se debió más a la casualidad que a las virtudes que él tenía.

Nunca dijo otra cosa cuando fue requerido para actuar en el equipo argentino que no fuera: “Yo llegué al seleccionado porque Celli se lesionó, ya que, de lo contrario, no hubiera jugado nunca o en contadas ocasiones”.

Cierto es que la lesión que postergó para siempre a Adolto Celli hizo que Ludovico Bidoglio pasara a formar parte del conjunto argentino; pero, tratándose de dos hombres de indiscutible calidad, las palabras del zaguero boquense se recluyen en la modestia que identifica a los grandes jugadores.

Fue, a partir de 1922, poco menos que irreemplazable, actuando con la casaca celeste y blanca en 33 partidos internacionales.

Prototipo del defensor de aquellos tiempos, de gran físico y estampa de hombre recio, tuvo los suficientes atributos como para tener la consideración del hincha a su favor, que lo eligió entre sus preferidos, postergando las ambiciones de Felipe Cherro, el hermano de «Cabecita de Oro», que por esos sños se había erigido como otro de los grandes defensores del fútbol argentino.

Con Ramón Muttis conformó una pareja de zagueros donde la fuerza de este último se conjugó a la perfección con la sutileza de Bidoglio, “Todos hablan de mi,decia, pero se olvidan de Muttis, que es quien me facilitó mucho las jugadas, aun. que desde afuera la cosa no parezca así.

El cuerpeaba y molestaba a los delanteros y yo los recl. bia entregados, Muy distinto sería que yo entrentara a un atecente con toda la fuerza en su carrera, Ramón es el que hizo mucho por el éxito de la zaga.”

En los primeros encuentros que jugó el seleccionado, los delegados lo llamaban igual, aunque sabian que el puesto de defensor central sería ocupado por Celli.

Jugaba como “centrojás”, donde imponía su personalidad y técnica en beneficio del conjunto. No era la mismo que cuando se alineaba como zaguero. Pero siempre dejaba presente su inalterable calidad de juego.

Fue el gran Vico.

Quiso el destino que una lesión,jugando para Boca, lo postergara, cuando su retiro parecia aún lejano.

Bidoglio nació (5 de febrero de 1900) y vivió en Palermo. Se inició en un club de barrio, denominado “Adelante Vamos”, Luego llegó a la cuarta de Sportivo Palermo (1916), como entreala derecho. Cuando su Club se fusionó con Eureka, pasó a ser titular en primera división, Y jugando un amistbso frente a Centenario Argentino se lesionó un zaguero, y Ludovico cubrió el puesto, del que nunca más se movió. A fines de 1922 llegó a Boca. Pero a la fama recién en 1924, frente a los olimpicos uruguayos.

Jugó hasta el 27 de diciembre de 1931. Vico fue insustituible durante siete años en partidos internacionales, Falleció el 24 de diciembre de 1970.

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